Abogados y Abogadas.

El 23 de junio se celebra en Venezuela “el Día del Abogado”, en honor a Cristóbal Mendoza, hombre nacido en la ciudad de Trujillo en el año 1772. A lo largo del ejercicio de su profesión hizo honor a la etimología de la palabra abogado que en latín ("advocatus") significa ir en auxilio de quien así lo solicite ("ad auxilium vocatus") En 1811 formó parte del Triunvirato del Poder Ejecutivo que gobernó a Venezuela, correspondiéndole el título de primer presidente de nuestro país, Ostenta, además, la honra de haber firmado el Acta de la Independencia.

Este término en la actualidad he visto como en la práctica, ha sido desfasado totalmente, pudiendo presencial como colegas no se rigen de ningún modo por el Código de Ética Profesional del Abogado, inclusive ni siquiera eso, sino de ética de todo profesional, que es el respeto a otro, parecen aves rapiñas en busca de su presa y en su camino no les importar a quien dañan o perjudicar, todo por el amor al dinero, produciéndose un detrimento hacia la profesión.

Para ilustrar esto, quiero compartir algo que me sucedió; (…) una persona que ya había conversado y acordado encargarme de su asunto, salgo del recinto a las dos (02) horas aproximadamente que vuelvo al lugar donde se encontraba el cliente con el fin que firmara la solicitud de mi juramentación, descubro que otro colega a sabiendas que ya tenía abogado (el mismo cliente se lo menciono) lo embarco ofreciéndoles mejores servicio a menor costo, cayendo este colega en un desfalco a esta profesión, así como esta puedo mencionar muchos casos entre ellos he visto como colegas de “vieja data” denigran a los abogados “nuevos” mencionándoles toda cantidad de calificativos peyorativos.

De seguros que habrá colegas que se identificaran por cuanto se ha convertido en la lucha del día a día igualmente mencionar a colegas que mienten fríamente perjudicando a otros abogados, lamentablemente en la actualidad, todavía existen otros que son verdaderos artistas en hacer que el pleito que llevan nunca termine y yo digo que “justicia tardía no es justicia.”

Los ejemplos anteriores descritos, me obliga a mencionar el rescate de la ética. Algunos abogados han olvidado el concepto de esta palabra y oportuno es recordarla. ÉTICA, es una afirmación que contendrá términos tales como 'malo', 'bueno', 'correcto', 'incorrecto', 'obligatorio', 'permitido', entre otros, referido a una acción o decisión, pero esta debe estar basada como lo manda Cristo (Jesús) en el Evangelio: "Haced el bien a tu prójimo como a ti mismo".

Sin embargo, debo mencionar que hay colegas que cuentan con esta ética profesional, cuyo objetivo fundamental es socorrer en la defensa del valor de la rectitud. Cuenta con una sólida formación teórica, altamente capacitado (a) y dispuesto (a) a enseñar de corazón y sin mezquindad de conocimiento, dejando su huella imborrable en la historia, abrazando el ideal de la justicia.

Nuestra Constitución en su artículo 253 señala: “ (…) El sistema de justicia está constituido por el Tribunal Supremo de Justicia, los demás tribunales que determine la ley, el Ministerio Público, la Defensoría Pública, los órganos de investigación penal, los o las auxiliares y funcionarios o funcionarias de justicia, el sistema penitenciario, los medios alternativos de justicia, los ciudadanos o ciudadanas que participan en la administración de justicia conforme a la ley y los abogados autorizados o abogadas autorizadas para el ejercicio. (…)”

Debemos de reconocer que estamos insertos en esa realidad y afrontarla con actitud humana bajo los principios de las normas de la ética, la moral y la justicia. Eso si justicia que sostienen como fin el alcanzar la igualdad entre los seres humanos y los instrumentos para que se dé esto somos nosotros (abogados y abogadas) que tienen como una de las tareas conseguir la justicia social, entendida esta como aquella que busca los objetivos colectivos que deben ser perseguidos, defendidos y sostenidos, esa es mi apreciación sobre el estándar de justicia efectiva. Sin embargo, el primero que señalo este concepto, fue el Libertador Simón Bolívar en su discurso de Angostura del 15 de febrero de 1819.

En conclusión, son numerosísimos los aportes que los abogados podemos hacer, en tanto al sistema de justicia que sabemos que aún persisten fallas, pero que sin duda alguna debemos construir los abogados y abogadas honestos y que estamos comprometidos con el proyecto de país señalado en nuestra Constitución.

“Ama a tu profesión de tal manera que, el día que tu hijo te pida consejo sobre su destino, consideres un honor, proponerle que se haga abogado”.

FELIZ DÍA DEL ABOGADO Y ABOGADA.


José F. Monaza M.
Abogado.
Monaza17@hotmail.com
http://asesorialegalenvalledelapascua.blogspot.com/